Cuéntame

La actividad de contar manifestantes se ha caracterizado por la disparidad de sus resultados. Un ejemplo brutal lo hemos tenido recientemente con la manifestación contra el aborto celebrada en Madrid en el pasado domingo 17 de Octubre. Los organizadores desde Intereconomía afirmaban que no había un millón de manifestantes, decían que había dos.
La agencia EFE ha contratado a una empresa que mediante fotos desde un zepelín calcula contando las cabezas una a una de los manifestantes que han asistido. Claro que caben los errores pero la empresa Lynce los cifra entre un 15% y un 10%. En este caso el resultado ha sido de 55000, algo así como 2000 menos que la manifestación del orgullo gay.

La verdad esto del zepelín y el contaje uno a uno suponemos que le hará cobrar a Lynce un pastón. Pero hay que señalar que desde hace unos cuantos años ya había unos activistas de la estadística, agrupados en el Manifestódromo, que, hartos de ver las cifras irracionales que presentaban organizadores y policías, aplicaban un sistema de cálculo racional que permite hacer cálculos realistas.

El procedimiento es sencillo y razonable. Se trata de pasearse por los límites de la manifestación para determinar cuál es el área ocupada. Al tiempo se sacan fotografías para estimar la densidad de personas por metro cuadrado. Con herramientas como google maps se calcula el área. En nuestro caso eran 48 Hectareas. La gente del manifestómetro estimó que la densidad media por metro cuadrado era entre 1 y 1,5 por metro cuadrado. Si tomamos la media resultan 60.000 personas resultado totalmente coincidente con los resultados de Lynce, pero algo más barato. El Manifestódromo lleva tiempo funcionando y mostrando resultados que se apartan siempre de las cifras declaradas por los organizadores de manifestaciones y los titulares de los periódicos. Esta vez la prensa ha hecho referencia a contajes realistas por la contratación de Lynce y en algún caso al Manifestódromo. No es lo mismo ser de la agencia EFE que un blogero.