Es obligado. Tengo que hablar de economía y desgraciadamente soy un perfecto ignorante en el tema. De lo que podría hablar es de lo que dicen otros, los llamados expertos en economía. Pero es muy difícil, si uno no es a su vez un experto, adivinar a que experto hacer caso. Porque, aparte de estar todo el mundo de acuerdo en que vienen malos tiempos, en lo demás las opiniones son muy diversas.
La solución principal que se propone es esperar que vengan tiempos mejores. Por aquello de que todo lo que sube acaba bajando, se espera que lo que bajó, salte de pronto hacia arriba. Pero esto último tal vez solo sea un buen deseo. De repente a la economía le ha caído una enfermedad de esas que se le aparecen al doctor House y la única medicación a mano son unas cuantas cajas de aspirina e ibuprofeno.
En cierto modo es como si estuviésemos hablando de meteorología, que prácticamente no tiene nada que decir para un intervalo de tiempo mayor de 10 días. Eso sí, asegurar las ventanas y los tejados. Si se puede, huir de las zonas costeras. Aprovisionarse de agua y alimentos, comprar pilas para las linternas, pastillas para desinfectar el agua etc.. etc ...
En estos últimos días Rajoy se empeñaba en decir que que el gobierno debía hacer algo. Y eso es lo que ha ocurrido, el gobierno ha decidido hacer algo. Seguramente será algo bastante razonable, pero mucho me temo que puede tener solamente un efecto analgésico.
Hoy he quedado a comer con un economista, espero mañana contaros algo con sentido. Es un experto y también mi amigo, así que le creeré.
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