martes, 31 de mayo de 2011

Argumentos populares

Los partidos tienen una cosa que se llama argumentarios. En ellos se trata de desarrollar la retórica de los argumentos propios. El diccionario de la RAE define la retórica en su primera acepción como
"Arte de bien decir, de dar al lenguaje escrito o hablado eficacia bastante para deleitar, persuadir o conmover."
No es extraño que la retórica haya estado siempre ligada con la política, pues muchas veces vale más ser "pico de oro", que la sustancia que pueda haber detrás. Pues bien, ver el tipo de retórica que se emplea en los argumentarios califica bastante a sus autores.

La imagen que presento es la de un argumentario del PP. En el se "demuestra" que, más o menos, la culpa de lo de los supuestos pepinos es del PSOE. Aunque lo que de verdad resulta ser es una demostración del tipo manipulación que manejan "los populares".

Homenaje a Maitere

Mi amiga Maitere, maestra y activista política desinteresada, falleció hace unos días y el sábado se celebró un homenaje en su honor en la plaza de Iurreta. En el participaron txistularis, dantzaris, trikitilaris, dulzaineros, compañeros de trabajo, padres de la escuela, inmigrantes y amigos. De este acto he entresacado la intervención de Santi Burutxaga en nombre de Txomin Barullo y de sus compañeros del antiguo EMK.

Maitere fue maestra y siempre tuvo el respeto y el cariño de sus alumnos, los padres de los alumnos y de sus compañeros. Maitere era profundamente euskalduna. Amaba el euskera y lo defendía con pasión y determinación. Pero nunca fue nacionalista. No es extraño que tuviera complicidad con la comunidad inmigrante. Fue militante política en el EMK y en Zutik y estuvo siempre mezclada con cualquier causa donde ella viera injusticias.

Pero otra cosa por la que siempre recordaré a Maitere es por su manera de ser. Era alegre, animosa y una buena persona. Maitere era buena, os lo aseguro.

jueves, 26 de mayo de 2011

Juan Carlos Eguillor

imaginación, humor, sorpresa, rapidez, cariño, surrealismo, euskadi sioux, meninas, amistad, audacia, dispersión, txomin barullo, crueldad, ingenuidad, mari agirre, ternura, curiosidad, diversidad, ordenadores,  surrealismo, reirse empezando con uno mismo, amor y odio a la vez, simulación, aventura, travesti, la abuelita, lealtad, bondad, disparate, delicadeza, franqueza, supervivientes, perros, bilbao, donosti, elorrio, agustina, ........

miércoles, 25 de mayo de 2011

El dilema del PNV

Las elecciones han resultado ser agridulces para los jeltzales. En donde aparecieron moderados y más abiertos como es el caso de Azkuna fueron dulces. En donde quisieron ser más soberanistas que nadie, muchos votantes optaron por el original antes que la copia y fueron agrias.

Tengo varios amigos que desean que Martin Garitano sea el Diputado general, porque quieren que la población pueda ver como gobierna alguien que ni tiene conocimiento ni preparación para ese cargo. Si el PNV apoya a Bildu se podrá ver lo que sucede con este experimento sin gaseosa, a costa de la población guipuzcoana. Así cumplirían  aquello de permitir que salga adelante la candidatura más votada, mantra que han repetido hasta la saciedad, cuando no imaginaban que Bildu les iba a sobrepasar.

La presencia de Bildu en las instituciones plantea un problema que ha estado oculto en los últimos tiempos porque el asunto de sus relaciones con ETA estaba en un primer plano. Es el problema de su incapacidad técnica, el problema de su inexperiencia para regir instituciones de un cierto tamaño y su oposición a grandes proyectos que están ya en marcha, me refiero por ejemplo al TAV. Es decir la capacidad que tendrían de, aunque no fueran capaces de impulsar nada nuevo, paralizar proyectos existentes. Esto se podría evitar con un gran pacto, por supuesto de conveniencia, entre las tres formaciones con tradición de acatar la legalidad. Resulta curioso que las evidentes diferencias que surgían en Gipuzkoa entre PNV, PSE y PP, en lo referente a la propia legalización de Bildu, puedan desaparecer para hacer un frente anti-Bildu por razones prácticas. En fin el PNV tiene la palabra, porque no creo que ni al PSE, ni al PP les parezca una mala idea.

martes, 24 de mayo de 2011

Partidos abiertos

En las anteriores elecciones, las que llevaron a Patxi López a la Lehendakaritza, se produjo un cambio de actitud en el Partido Socialista durante la precampaña y campaña. Muchas personas ajenas al partido, entre las que me encuentro, nos acercamos con ilusión con objeto de lograr que Ibarretxe dejase de ser nuestro Lehendakari. Recuerdo aquella campaña como algo muy estimulante. Gentes de muy diverso pelaje colaboramos en la tarea de conseguir una Euskadi donde el concepto de ciudadanía estuviese en el centro. He de decir que el resultado no me ha defraudado, que pienso que el actual Gobierno vasco, con todas las dificultades que tiene y todos los errores que haya podido cometer, ha logrado crear un clima de tranquilidad que ha tenido desde luego, su reflejo en estas elecciones.

Sin embargo tengo que decir que en esta campaña el PSE-EE no se ha molestado mucho en crear lazos y complicidades con la sociedad civil. Parecería que después de conseguido el gobierno no interesan las aportaciones externas. Por ser benévolo la campaña ha sido bastante burocrática.

Como dice Txetxu Barandiaran:
El PSE había conseguido en los últimos comicios una cierta 'movilización épica', casi heroica, de sectores desencantados, no militantes del partido y animosos colaboradores del mismo que con el rum-rum del tiempo se han visto, nos hemos visto dejados de lado o pidiéndonos que interpretáramos músicas distintas a las acordadas.

Los partidos modernos no son solo de sus afiliados, son también de sus votantes y simpatizantes. Creo que en esta campaña el PSE-EE se ha comportado como un partido bastante antiguo.

lunes, 23 de mayo de 2011

¿ETA existe?

Ayer recibí malas noticias. Batacazo del PSOE, mayoría absoluta de Azkuna, subidón del PP y arrase de Bildu en Gipuzkoa. Casi las únicas buenas noticias son la mayoría del PSOE en Cuenca y el que, a pesar de las encuestas, hayan salvado los trastos mis amigos de Batzarre. De todas las maneras tiempo habrá en analizar los resultados.

Hoy me quería referir a un tema que ha estado bastante oculto en la campaña. Se diría que la gente ha votado como si ETA no existiera. Los candidatos de los partidos constitucionalistas no han sido agredidos o amenazados. Ha habido la tensión normal que puede haber en Andalucía o en Castilla La Mancha. No ha habido kale borroka en la campaña. Salvo el PP, no se ha ligado a Bildu con ETA. Bildu ha evitado hacer referencias a ETA. Ocupaciones de la calle como las protagonizadas por el 15M hablaban de los problemas del paro, la crisis, las hipotecas, el sistema electoral sin referirse en ningún caso a ETA, etc ...

Sin embargo ETA existe. No ha desaparecido. Se insiste que ha sido derrotada, pero ahí está. El evidente triunfo de Bildu convertida en segunda fuerza en estas elecciones va a tener una lectura tanto en ETA como en la Izquierda Abertzale. ¿Cuáles van ser éstas?
¿Considerará ésta que, dado que la operación electoral se ha realizado sin la necesidad de disolverse, debe seguir ejerciendo su tarea de vigilante de la playa?
o por el contrario
¿Considerará que carece de sentido su actividad y que debe desaparecer?
y la izquierda abertzale
¿Considerará que, una vez pasado el control judicial, puede andar más sueltita y que no hay que molestar a ETA?
o por el contrario
¿Se considerará cargada de razones para decirle a ETA que se acabó?
Y por parte de los "vientres de alquiler", EA y Alternatiba. Pasada la euforia de haber salvado los trastos personales
¿Tendrán alguna capacidad de presión sobre la izquierda abertzale?
o
¿Serán apartados como los zánganos de la colmena después de su ayuda en el parto?
En todo caso ETA sigue existiendo y habrá que acabar con ella.

domingo, 22 de mayo de 2011

Funcionarios por un día (61,62)

El día de las elecciones es el día de la gran fiesta de la democracia. Pero no lo viven así muchos de los participantes en ella: los miembros de las mesas electorales. Casi dos centenares de miles de españoles pasan el día aburridos (si hay diversión es que la cosa va mal) al lado de las urnas. Su tarea no es muy complicada, pero no carece de responsabilidad.

Lo cierto es que la mayoría de quienes reciben la comunicación  de que les ha tocado mesa, hacen un gesto de disgusto al leerla. Les espera un rollo de día. Unas 14 horas de trabajo (de 8 de la mañana a 10 de la noche) por 62,61 euros y la posibilidad de, para quien tenga trabajo, 5 horas libres a día siguiente. Esto es un salario de 4,47 euros a la hora. No es una gran cantidad.

Comparémosla con el salario mínimo interprofesional. Este tiene un valor  de 748,3 euros por mes (pagas prorrateadas). Calculemos lo que sale por hora, tomemos para ello en cuenta la jornada anual de trabajo del personal funcionario al servicio de la Administración de la Comunidad Autónoma de Euskadi y sus Organismos Autónomos, que era en 2005 (no creo que haya aumentado) de 1592 horas por año y una media mensual de 132,66 horas. Si dividimos el salario mensual de 748,3 euros por la media mensual de horas 132,66, obtenemos el salario mínimo por hora: 5,64 euros. Es decir  nuestros ciudadanos responsables de las mesas electorales cobran un 20% menos que el salario mínimo

¿Qué extraños cálculos han llevado a que los miembros de las mesas cobren precisamente esa cifra de 62,61 euros? Creo que una cifra doble de la actual no sería una exageración. Entonces ¿Por qué la mayoría de los nombrados acude a la mesa? ¿Es por sentido cívico? Algo de eso puede que quede, pero me parece que la explicación más común es otra. Es difícil encontrar una excusa oficial válida y si uno no la tiene, arriesga multas e incluso cárcel. En definitiva es aquello de que la democracia con sangre entra.

sábado, 21 de mayo de 2011

We camp

Hoy he visitado la acampada de Bilbao en el Arriaga. Yo creo que había un par de miles en la asamblea. Me ha resultado emocionante. Me traía recuerdos. Los de finales de los 60 cuando había asambleas, en donde se defendían todo tipo de ilusiones. Unas cosas eran posibles y se realizaron. Otras eran también posibles y no se consiguieron. Otras por supuesto, eran imposibles, aunque constituían una guía utópica interesante y también había soberanas tonterías, junto con cosas claramente equivocadas. Aquel movimiento estudiantil, en el que tuve el gusto y el honor de participar, tuvo un papel importante en la conquista de las libertades en España. Y eso a pesar de que muchas de las ideas que defendíamos estaban francamente desenfocadas. No importó, porque íbamos en la buena dirección.

Bueno, pues mientras veía a los concentrados en el Arriaga se me agolpaban los recuerdos. Oyendo las variadas intervenciones veía la frustración de muchos jóvenes. Por primera vez en muchos años, tal vez les espere un futuro económico peor que el de sus padres. En contra el desempleo y el trabajo precario y basura. Peticiones de hipotecas con limitación de garantías. Cambio de sistemas electorales. Salarios máximos. Nacionalización de la banca etc ...

Y este movimiento se ha producido en plena campaña electoral, lo cual le añade un plus de complejidad a la cuestión. No defienden la abstención, pero es muy posible que haya un aumento importante en el voto en blanco y nulo. Al tiempo, partidos como Izquierda Unida andan con el cazo puesto. Mezclados con gentes que por primera vez han ido a asambleas, aparecen miembros de pequeños grupos sociales y políticos, que jamás han disfrutado de una audiencia semejante. Pero hay una resultante de todo ello y me parece muy positivo. La convicción de que la crisis ha creado una situación insoportable. La convicción entre los asistentes de que la pasividad no lleva a ninguna parte. La convicción de que hay que implicarse y que "pasar" no es una buena actitud.

Hay otra consideración muy importante para el País Vasco: la calle no es de Batasuna. Bildu ha dejado la calle a otra gente, gente que no habla de identidades ni de problemas ideológicamente construidos. ¿Alguien imagina que esto hubiera podido suceder sin la sentencia del Tribunal Constitucional autorizando a Bildu? Mientras estaba en la plaza hubo una intervención que me pareció significativa. El orador señaló que
las amas y aitas deberían estar en la plaza, pero que su ama le había dicho que tenía miedo.
Y desde la plaza le decía:
ama no tengas miedo, aquí no pasa nada.
No hay duda que el miedo está desapareciendo del País Vasco.

jueves, 19 de mayo de 2011

¿Por qué mi voto no es secreto?

La institución del secreto del voto es fundamental para garantizar la democracia. ¿Cómo sería la cosa si no pudiéramos mantener el secreto de nuestro voto. Durante la dictadura de Somoza en Nicaragua había elecciones y en general necesitaban hacer trampas para asegurar la victoria del Somoza de turno. Simplemente no había secreto de voto. No solo no había cabinas de votación, el sistema era más fácil, había tantas urnas como candidatos a votar y tantas colas como urnas.

Durante estos últimos años declarar públicamente el sentido del voto propio, en algunas zonas del País Vasco, era un ejercicio de sinceridad que tenía un precio muy alto. Todavía lo tiene a veces. Pero las cosas han cambiado.

Pero hay situaciones en la vida en la que desvelar el voto puede no ser conveniente. Si uno es comerciante se pueden perder clientes. Si uno es periodista  jamás resultará creíble que se sea independiente. Si uno vive de las subvenciones, puede que tenga problemas con los gobiernos que no votó. También se pueden tener problemas con la cuadrilla o con los amigos si se dejó de compartir ideas políticas.,

Soy jubilado y tengo mi vida asegurada. Y si mis amigos se enfadan porque no compartimos ideas políticas será su problema, así que me siento con libertad para que mi voto no sea secreto.

En Estados Unidos, el país donde la democracia lleva más tiempo funcionando de manera ininterrumpida, a la gente no le importa hacer público el sentido de su voto, con pegatinas en sus coches o con pequeños carteles en las entradas de sus casas. Creo que esa opción tiene ventajas. Permite que cada ciudadano haga propaganda con sus ideas y que exista la posibilidad de dialogar entre ciudadanos. Así que me siento en condiciones de revelar el sentido de mi voto.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Por qué no voto al PNV

Tengo unas cuantas razones viscerales para no votar al PNV. Son más de derechas de lo que puedo soportar. Me suelen atacar con tanta boina y demás. Son el auténtico establishment, al menos de Vizcaya. Tienen una red clientelar perfectamente establecida y consolidada. etc ... Así que si votase con el corazón no tendría muchas dudas.

Pero no se trata de eso. Aunque no me caigan bien como partido ¿Sería bueno para el País Vasco que tengan un buen resultado? Si examino el caso de Vizcaya, que es donde voto, no encuentro ninguna razón para apoyarles.

Veamos, desde que hay democracia no he tenido otra cosa que diputados generales y alcaldes del PNV. Tanta repetición ya sería como para echarse a temblar. Si uno ve además que, en las encuestas, hasta tienen posibilidades de conseguir la mayoría absoluta, el tembleque me aumenta. No creo en las mayorías absolutas, me parecen malas para este país.

Si vamos a los casos concretos, también encuentro razones para no votarles. La Diputación al mando del señor Bilbao ha destacado en los últimos tiempos por empeñarse en encontrar motivos de pelea con el Gobierno vasco. Empezó la cosa en la propia toma de posesión del Lehendakari donde hasta pretendió variar el protocolo. La propuesta del Guggenheim 2 no le había gustado al Gobierno vasco de Ibarretxe y el Sr. Bilbao se fue con el rabo entre las piernas. Pero después del cambio de gobierno volvió a la carga, pero esta vez quienes se oponían eran "malos vascos que no querían el desarrollo de una zona deprimida". En cada cuestión a discutir con el Gobierno vasco siempre ha habido pegas. Que si la construcción de las nuevas lineas de metro, la extensión de horarios en nochebuena o la lanzadera. Todo ello con desaires institucionales continuos. Mientras, se ha tenido que comer su plan de inversiones. Curiosamente, aunque ha seguido aumentando el gasto corriente, tal vez por sus técnicas de buena gestión, ha disminuido las inversiones. Como son "autenticos vascos" se han permitido reducir un 20% el presupuesto dedicado al euskera. El Gobierno vasco solo ha disminuido las ayudas el 3%,  menos que la disminución el presupuesto, y a pesar de ello recibe ataques de determinados medios abertzales.

¿Y Azkuna? pues la verdad es que me produce sentimientos menos negativos que los que experimento con el Sr. Diputado General. Agradezco su desmarque de las políticas ibarretxianas en la época que eran dominantes en su partido. También me place su evidente amor por la villa. Y su compromiso contra el terrorismo.

Pero sin embargo creo que su tiempo ha pasado, como persona y como partido. No todos los barrios votan igual. Y la Ley de la gravitación universal, que también funciona en política, hace que tras 30 años de alcaldes del PNV algunos barrios sean más favorecidos que otros. Casualmente los barrios menos apoyados están donde habita la gente con menos recursos económicos. Por otro lado aunque el alcalde Azkuna muestre su encanto en sus declaraciones ante los medios, suele demostrar una prepotencia y autoritarismo no muy adecuado, no exento de paternalismo, cuando trata con las protestas ciudadanas. Está, como se podría decir popularmente, "un poco subidito". Creo que le deberíamos agradecerle muy sinceramente los servicios prestados y decirle que ya pasó su tiempo.

Por otra parte si nos referimos a la actitud general del PNV sigue sin tener una verdadera posición. Así Urkullu puede ir por la mañana a Gernika para ir de soberanista y por la tarde ante una representación (sic) de la sociedad vasca aparece de supergestor demócrata:  paz y crisis. Entiendo que muchas veces los políticos no puedan mantener sus promesas, pero me parece la pera que Urkullu pueda amar las dos almas del PNV a la vez "y no estar loco".

Bueno, esta claro. No les voto.

lunes, 16 de mayo de 2011

Por qué voy a votar al PSE-EE

No creo en las fidelidades de voto. No creo en aquello de que "siempre he sido de estos". Eso me vale para el fútbol, pero no para la política. Yo no creo que porque un equipo de fútbol tenga un mal entrenador y/o presidente me tenga que cambiar de equipo. Pero si creo que por mucho que yo haya votado a un partido, si no lo ha hecho bien será mejor que me busque (si puedo) otro a quien votar. No creo que los ciudadanos tengan que ser fieles a los políticos. Son los políticos los que tienen que ser fieles a los ciudadanos. Sin embargo esta vez, a pesar de mis declaraciones de "no fidelidad", he decidido repetir.

Para juzgar a los políticos más vale aplicar aquella máxima evangélica de "por las obras les conoceréis", urge pues fijarse en lo que han hecho en los últimos tiempos y no tanto en lo que proclaman en la campaña. Hace dos años comenzó un experimento en el País Vasco. Era un experimento de verdad, no de los que se hacen con gaseosa. Tan novedoso era que llenó de inquietud a buena parte de la ciudadanía vasca: ¡Un Lehendakari socialista! Hubo quien no quería reconocer la realidad y llegaba a no admitirle como un Lehendakari legítimo. Hoy solo quienes tienen el corazón lleno de odio pueden hacer ese tipo de consideraciones. El desastre que se anunciaba no ha sido tal. Todo lo contrario.

Al actual Gobierno vasco no le ha tocado navegar con viento en popa, el viento ha soplado por otro lado. Tal vez por ello, por la dificultad de la navegación, resultan más meritorios sus éxitos. Muchos nacionalistas moderados se han visto obligados a reconocer, aunque casi siempre en privado, que gracias al Gobierno socialista se ha producido una evolución digamos tranquila en el PNV, que le sitúa bastante lejos de las posiciones maximalistas ibarretxianas. Porque la acción del Gobierno vasco ha sido fundamental para el camino de la moderación y de la concordia en el País Vasco.

Si miramos a los otros partidos la situación ha propiciado una moderación en la mayoría de ellos. Pensemos en el PP. Comparemos el actual PP con el de María San Gil, Iturgaitz o Mayor Oreja. Se ha producido un cambio muy importante. ¡Ahora hablan de pactos con el PNV, su demonio particular! Empieza a producirse la convergencia entre quienes tienen intereses económicos comunes sin que la tensión identitaria sea un obstáculo mayor. Y ¿Batasuna? Ahí está haciendo declaraciones en contra de la violencia, también en contra de la violencia de ETA. ¿Es que la acción firme del Gobierno vasco no tiene que ver con esto? Nada más producirse la toma de posesión del gobierno se inició una campaña en contra de las pintadas etarras. Algunos dijeron que era una campaña inútil porque las pintadas volverían. ¡Pues no han vuelto! ¿Con Ibarretxe hubiera sido igual? El PSE ha tenido una postura firme, pero al tiempo flexible y abierta. No hay más que recordar las declaraciones del Lehendakari después y antes del fallo del Tribunal Supremo.

No es que tampoco haya tenido este gobierno un gran apoyo del Gobierno central. La pérdida de apoyos de Zapatero en el Parlamento español ha hecho que el protagonismo de parte de las transferencias haya ido al PNV. Pero no nos engañemos las transferencias estaban en el programa socialista y difícilmente las hubiera conseguido del Gobierno español de no mediar el acuerdo con el Gobierno vasco. Y por supuesto no las gestiona el PNV.

¿Y la gestión de la crisis? El comienzo fue muy duro. Encontrarse con un presupuesto expansionista, ejecutado en su mayoría, legado del gobierno anterior y estar al tiempo casi en el punto más bajo de la crisis si consideramos algunos parámetros. Todo un reto. Hoy nos encontramos que la inversión neta del gobierno ha aumentado y que el gasto corriente se ha reducido. Resulta que se ha hecho "más con menos". En tiempo de crisis disminuyó el presupuesto, pero aumentaron las inversiones y las prestaciones sociales. Curiosamente las Diputaciones que han sufrido la misma reducción de presupuesto han optado por la política opuesta, disminuyendo las inversiones, al tiempo que aumentaban los gastos generales.

Y hay muchos datos positivos como el aumento del turismo, la creación de la agencia de cooperación, la puesta en marcha del instituto Etxepare, la promoción de herramientas digitales para el euskera, Irekia y toda la política de transparencia, esto por referirme exclusivamente a las cosas de las que tengo conocimiento de primera mano. Porque se podría hablar del aumento del dinero para ayudas sociales, del trilingúismo, de la política para tratar a los enfermos crónicos, del impulso a las obras del TAV, del compromiso con la industria naval ...

Ya, pero estas elecciones son municipales y forales. Lo sé. Pero en el País Vasco el poder está repartido (a veces mal repartido) entre muy diversas instituciones y creo que, para consolidar el cambio que ha supuesto la llegada de un Lehendakari socialista, es importante que los socialistas vascos obtengan un buen resultado. Por eso esta vez voy a repetir y les voy a votar.

martes, 10 de mayo de 2011

Buena Gestión

No cabe duda que el País Vasco es tierra de buenos gestores. Sin ellos no cabe explicar el éxito de la industria vasca. Si como sabemos, muchos de los capos industriales son de tendencia PNV, resulta muy razonable decir que el PNV tiene buenos gestores, al menos para gestionar los negocios propios.

Hay que reconocer que la gestión de lo público tiene características propias. Se dispara "con pólvora del rey". Cuando uno gestiona no arriesga su propio patrimonio. La gestión pública rigurosa precisa de que los gestores consideren lo público como algo más sagrado que lo propio.

Tal vez sea en este terreno donde el PNV ha demostrado graves carencias. Acostumbrado a que los errores de gestión no se pagaban, a que no pasaba nada. Las instituciones regidas con el PNV han manejado los dineros públicos con lo que podemos llamar cierta alegría.

Están apareciendo ejemplos con cierta frecuencia. Señalaré un par de ellos que están de actualidad. El caso Epsilon Euskadi. El asunto ha sido descrito pormenorizadamente en la prensa diaria así que no entraré en detalles "gore". Pero si quiero destacar que con toda seguridad el gestor jeltzale vio entre sueños a la ikurriña ondeando en los circuitos de Fórmula 1 y se le nubló la vista. No pudo ver que los números no "daban" por ningún lado. No entramos en la posible cadena de favores que pudo haber. Simplemente destaco que ha sido un ejemplo de clara mala gestión y de cómo se utiliza el dinero público para proyectos que tienen un fondo ideológico.

En El Correo de hoy tenemos otro caso. Euskotren pagó 26 millones para comprar 8 locomotoras. Lo hizo en una adjudicación de 12 locomotoras de carga dentro un pedido total de 37,5 millones de euros. La adjudicataria fue la empresa vasca Ingeteam y la adjudicó la consejería de Transportes, entonces al mando de Nuria Lopez de Gereñu, ahora en Confebask. La licitación de las 12 locomotoras se realizó en el marco de un plan para el desarrollo del transporte ferroviario de mercancías. Pero hubo una mala gestión, se empezó la casa por la locomotora y no se desarrolló nada de la infraestructura viaria necesaria para que pudiera haber un desarrollo del transporte de mercancías. Hoy día las locomotoras EuskoKargo, que en realidad no se sabe si funcionan muy bien porque apenas se utilizan dos, suponen una "euskocarga" de 3,4 millones de pérdidas anuales por depreciación.

Los gestores públicos del PNV están acostumbrados a hacerlo en épocas de abundancia donde unas decenas de millones de euros apenas se notan. Pero no están acostumbrados a hacerlo en épocas de apretarse el cinturón. Si comparamos en el ejercicio de 2010 la acción del Gobierno vasco con la de las Diputaciones, todas ellas en manos del PNV, se observa que el Gobierno vasco ha reducido el gasto corriente un 0,6 %. Por el contrario las Diputaciones aumentaron un 6.0%. Si miramos la inversiones resulta al revés. Las inversiones reales han crecido en el Gobierno vasco un 23,6%, mientras que las de las Diputaciones han disminuído un 14,3%

¿Cual es la gestión adecuada para tiempos de crisis? ¿Aumentar el gasto corriente y disminuir la inversión? o ¿Aumentar la inversión y disminuir el gasto corriente?

sábado, 7 de mayo de 2011

Elecciones sin pegas

Estas elecciones vascas serán tal vez las primeras en las que nadie pueda poner pegas. Ni el PP, ni el PSE han tenido problemas para buscar candidatos que quisieran presentarse en los lugares más remotos. Por otro lado, todos los sectores independentistas van a tener a quien votar. Y esto ha sido posible porque quienes gritaban en sus manifestaciones "ETA, herria zurekin" han dejado de hacerlo y aunque siguen manteniendo más de una ambigüedad, ya se atreven a "rechazar" los actos violentos etarras.

Es verdad que no sabemos si se trata de una actitud subjetivamente permanente. El tiempo lo dirá. Lo que es claro es que si vuelven a las andadas les caerá el peso de la ley. Curiosamente todas estas y venidas han venido a dibujar una linea clara de lo que no se pueden saltar.

Yo recuerdo, cuando era joven, el tiempo en que desconfiábamos de las gentes franquistas que se habían vuelto "demócratas" ¿era sincera la actitud de Adolfo Suarez? ¿Y Fraga? defendían valores y políticas que no compartíamos, pero resultaron ser respetuosos con las reglas democráticas. Tal vez en un principio adoptaron las formas democráticas por táctica, pero pronto se les volvió costumbre y por tanto convicción.

Ahora ya no es el tiempo de hacerse las víctimas. Ahora se trata de presentar propuestas. Propuestas que interesen a la ciudadanía. Como dice un amigo:
Ahora es la gran fiesta de la democracia: las elecciones.

viernes, 6 de mayo de 2011

Dios escribe derecho con renglones torcidos (Santa Teresa)

Eso es lo que parece que ha sucedido con el asunto Bildu. Santa Teresa de Avila ha tenido razón. Los caminos han sido tortuosos pero la decisión ha sido adecuada. El que no se pudiera presentar Bildu a las elecciones era, si se me permite decirlo, impresentable.

Ya sé que todas las decisiones tienen diferentes facetas y les toca a los políticos valorarlas todas, antes de tomar una decisión. Pero probablemente a los ciudadanos les queda otra tarea, la de expresar claramente su punto de vista, parcial pero absolutamente auténtico.

No me referiré a los efectos que hubiera tenido una prohibición de todas las candidaturas de Bildu. Me resultan tan evidentes que no hablaré de ello.

Sin embargo, sí me parece importante referirme a los efectos que ha tenido el camino de "renglones torcidos" que ha conducido a esta decisión.

Todas estas semanas, en un periodo en que una ley prohibía cualquier cosa parecida a una campaña electoral, resulta que todo el mundo ha ayudado a Sortu, queriéndolo o no, a desarrollar una impresionante campaña electoral.

Ha resultado palpable que aunque la independencia judicial existe, en el sentido que cada juez dice lo que le da la gana, parece que las posiciones ideológicas de los jueces coinciden en general con las de quien le propuso y cuentan más, que lo que podemos calificar como pura técnica jurídica.

Ha aparecido una grave brecha entre el País Vasco y lo que se llama la España no periférica. Para la mayoría de la España no periférica era muy difícil de entender que lo de Bildu era diferente de ETA. Ahora les queda a los dirigentes del área la responsabilidad de explicar la letra y el espíritu de la sentencia del Tribunal Constitucional.

Todavía me entra el nervio de pensar que la decisión se ha tomado por un 6 a 5

martes, 3 de mayo de 2011

EEUU liquida a Bin Laden

Con esta misma expresión "EEUU liquida a Bin Laden" titulan tanto El País como El Correo, la noticia de la muerte de Bin Laden. Es la expresión aséptica, como  de operación quirúrgica,  que permite deshumanizar la muerte de una persona. Bin Laden era ciertamente un criminal, pero también una persona. Nadie nos puede hacer creer que esos cuerpos especiales con derecho a matar, llenos de tecnología, no podían haberlo capturado. Lo que sabemos es que ni siquiera lo intentaron. Para quienes estamos en contra de la pena de muerte ha sido un asesinato.

Lejos, en la Casa Blanca, seguían el reality show privado. Con muchos nervios, pues del éxito de la operación dependían muchos intereses. Ahora Obama, en la tierra del "ojo por ojo", enfrenta en condiciones más favorables su reelección. Seguramente capturarlo hubiera sido más "sucio", con más problemas legales, que no tiene un cadáver, con la molestia de un juicio, con la posibilidad de que hablase más de la cuenta, creando un mártir vivo, etc.

La muerte de Bin Laden ha sido vivida por muchos políticos y periodistas españoles como algo normal. Contrasta con la alharaca que crearon las desafortunadas declaraciones de un expresidente español que se limitaba a reflexionar sobre la posibilidad que tuvo, de acabar con un bombazo con la cúpula de ETA. Lo de ahora a casi todo el mundo le parece "natural". Hemos visto demasiadas películas donde actúan fuerzas especiales que "liquidan" a los malos, como para que nos llame la atención el asesinato de Bin Laden.

Curiosamente no parece un gran golpe estratégico contra Al Qaeda, una organización que se caracteriza por su organización distribuida en red. Es ciertamente un golpe moral, pero el resultado es que todas las fuerzas policiales del mundo están en estado de alarma. Se sabe de antemano que no va a ser gratis. Lo de "muerto el perro se acabó la rabia" no parece que vaya a funcionar.

lunes, 2 de mayo de 2011

Justicia muy poco ciega

En política democrática se discute y si no hay acuerdo se vota. Esto no asegura que la decisión adecuada sea la correcta y mucho menos que satisfaga a todos los ciudadanos. La democracia no es un sistema para averiguar la verdad, es simplemente un sistema para tomar decisiones que permite salir del paso incluso cuando no hay acuerdo. Así se explica que quienes creemos en el sistema democrático estemos dispuestos a que nuestras posiciones pierdan por un solo voto.

En el dominio de la ciencia no se funciona por votos. Ni la teoría de la relatividad, ni la mecánica cuántica son admitidas porque alguien haya votado a favor. Lo son porque son consideradas como ciertas (dentro de sus límites) por la comunidad científica.

En la labor de los jueces nos encontramos en un terreno intermedio. No se trata de decidir lo que es más conveniente, sino averiguar la "verdad judicial" esto es: qué decisión se adecua mejor a la ley. Aparentemente la "verdad judicial" es única, los hechos se adecuarán a la ley o no. Habrá dudas si determinados hechos están probados o no, pero eso es todo. Desgraciadamente la vida es demasiado complicada para meterla en el saco de la ley, lo cual hace que en las leyes aparezcan ambigüedades, como es el caso de la llamada ley de partidos.

La justicia tiene que ser respetada. Es una condición para la convivencia y para ello debe de dictar sentencias que en su mayoría sean justas. Si la mayoría percibe con injustas las decisiones judiciales esto lleva consigo el desprestigio del sistema judicial.

El problema es que, cuando hay dudas, los tribunales se ponen a votar. Esto hace que habiendo desacuerdo en lo que es la "verdad judicial" el tribunal se embarca en la tarea de dictar "lo más conveniente" porque algo tendrá que decir. Así que puede ocurrir que la enfermedad de un juez, la designación por sorteo de una sala, etc... elementos puramente azarosos, pueden determinar la validez de una sentencia. En estas condiciones puede muy bien ocurrir que la sentencia sea contraria a la que desea la mayoría de la población.

Creo que es el caso de la sentencia sobre Bildu. Pienso que a la mayoría de la ciudadanía vasca no le ha gustado. A mi tampoco. Mucho menos cuando se ve que el voto de los jueces ha sido determinado por sus preferencias políticas y no por criterios técnicos.

¿Que hacer cuando una sentencia no gusta? Yo creo que no queda otra que acatarla. Menos sentido tendría que la sentencia se inclinase por el lado de la minoría. Afortunadamente el sistema judicial tiene previsto el recurso al Tribunal Constitucional. Y en ello confío. Veremos si tengo razón.