Estoy sobre el Atlántico, aunque sólo se ven nubes, en esa especie de cápsula que son los aviones. Ya llevo 12 horas desde que salí de Bilbao y el cuerpo me protesta por cansancio. Tengo un francés al lado que no para de hablar a gritos. Hago gimnasia. Me quedan tres horas para San José y siete para Managua. Pienso en lo que me espera. Una bocanada de aire tropical y unos aduaneros que serán o bordes o indiferentes (la mejor posibilidad). Se trata de pasar jamón al vacío, en lonchas y también como medio jamón deshuesado entero, anchoíllas, chorizo, quesos de diversos tipos, chocolate. Traer el recuerdo de sabores a nuestros amigos europeos. Estoy nervioso de que es lo que voy a encontrar en Nicaragua. Según los periódicos las cosas están peor. Más corrupción, más pobreza, más autoritarismo.
Ya llegué a San José (Costa Rica) Nos reciben unos personajes vestidos de Hospital Central con fonendos y mascarillas. Resultan francamente impresionantes. Bueno en el aeropuerto tienen Wifi gratuito. Estos "ticos" no son cutres como los aeropuertos españoles. Cada poco suenan los altavoces diciendo que si uno tiene síntomas de dolor de garganta, fiebre etc ... se presente ante la autoridad sanitaria. Tiemblo por mi rinitis mas o menos crónica. Dentro de un rato embarcamos para Managua. Completaré el post allí.
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